(Aprovechando que este día íbamos a ir de tiendas y museo me puse un vestidito con leggins que luego no lucí mucho por llevar el abrigo, jeje.)
La visita al Arco de Triunfo al menos para mi se ve estropeada por la lluvia y el viento.
Yo no quería estar mucho tiempo allí, me estaba empapando. Fuimos bajando los Champs Elisees y fue amainando la lluvia. Entramos en los concesionarios Toyota (coche unipersonal), Citröen..etc algunos mas guais que otros. Entramos al Fnac, me compré una tarjeta de 2G para la cámara porque no me cabían en la antigua. (bueno, vale, me olvide de vaciar las fotos pasadas).
En la Virgin Store habían DVD bollywood x 10E, me compré mi queridísimo Om Shanti Om. (quise comprarme más pero sólo estaban subtitulados en franchuten e inglés).
La avenida de tiendas dio paso a una explanada y zona ajardinada. Había un terrenito a modo de huerto colectivo aunque supongo era fuera de temporada ya que no había nada plantado. La zona de museos, y al otro lado del río, los Invalides, que ya habíamos visitado una noche. De día también se veía bonito con toda la cúpula y decoraciones doradas resaltaban con el sol que salía a ratos. Hicimos fotos y continuamos el curso del río Sena, chispeando poquito todo el camino. Pasamos por la plaza de la Concordia y por delante del museo Orsay y más adelante llegamos al parque de la zona del Louvre.
Louvre: Al ser viernes, supuestamente cerraban el museo más tarde. Dudamos si entrar en ese momento (las 15.30h) o esperar a entrar a las 18h con el precio gratis/reducido.
Fuimos a preguntar si efectivamente ese día el museo cerraba a las 21h. Muka intentó preguntar en francés a unos de la puerta que estaban fumando, a que hora cerraban. Pero el chico entendió que preguntaba si se podía fumar allí..juas..en fin..con el 2º intento ya pudimos confirmar que cerraban más tarde.
Con calma o no tanta..porque a esas horas ya no servían comidas en los restaurantes, fuimos a buscar alguno abierto...había algún chino, japo, libanés, nos decidimos por un japo que no tenia mala pinta. Y al darnos media vuelta ya habían bajado la persiana!!
(El desayuno del hotel era abundante por lo que depende del día, podíamos aguantar a para comer hasta las 16h)
Así que entramos en el libanés. Nos moríamos por ir al lavabo. Al ver un cartel donde ponía que no funcionaba, Muka decidida hizo ademán de marcharse a buscar otro local.
Por suerte ese cartel era falso, solo para “no clientes”. A mi me apetecía un pseudo combinado como el Ugarit de Bcn...jeje ellas pidieron pizza y sandwich. Mi combinado no estaba mal, pero las croqueta de pollo eran mu sospechosa..no quiero entrar en detalles..se la comió Muka.
De postre se zamparon un pastelito , yo no podía nada más.
Regresamos al Louvre, como todavía no eran las 18h, esperamos para sacar el ticket especial. Hicimos tiempo tomando fotos a la pirámide, al hall..Miramos que visitar 1ero.
Pedí por favor a las amigas de ir a la planta 2 para ver las pinturas holandesas: Van Eyck, Rubens, Veermer. Vimos también cuadros medievales, retratos. De camino a la Monalisa pasamos por varias salas de objetos, también la sala de las joyas de la corona. Pasamos por delante de la escultura griega Nike con caida al suelo de Muka por las escaleras ...
En el mega pasillo de pintura renacentista, Leonardo, Rafael, Caravaggio, aunque no fuera importante la obra, a distancia reconocía el estilo, sabía que era de un autor importante y me acercaba (es lo que tiene haber hecho varios años de Historia del Arte entre la ESO, Bachillerato y Bellas Artes...algo se queda) por fin llegamos a la Monalisa/ Gioconda. En mi foto no se si parezco yo más el personaje que el del cuadro jeje. (Atenea, nuestra compi, estaba un poco cansada, ella sólo queria ver la Monalisa y algún otro.)
Seguidamente vimos pintura francesa, Delacroix, Estel guiando al pueblo, digo La libertad guiando al pueblo, jeje ( es que en una foto aparece ella delante del cuadro), Medusa...etc. También habían de Ingres y de Jaques-David. Lamentablemente yo buscaba el de “La Muerte de Marat” del mismo autor, pero no estaba.(He descubierto que esta en un museo de Bruselas, quizás para la próxima visita por allí...) En otras salas tenían pintura clásica española pero eran obras menores, algún Goya, Murillo y Greco...
Era hora de cerrar por lo que fuimos volando a la Venus de Milo. Las otras salas de arte antiguo no tuvimos tiempo de verlas muy a mi pesar, perfecta excusa para volver.
Aunque para volver a París no hacen falta excusas, jeje.
Salimos al hall y por un pasillo dimos con la pirámide invertida, hacer la foto de rigor era complicado, ya que detrás aparecía el icono de la tienda apple luminoso y gigante, pero lo conseguimos. Una vez en la calle buscamos la supuesta parte exterior de la pirámide invertida, miramos un poco pero desistimos, al ser de noche podría estar detrás de unos setos y preferimos no buscar más. Y eso que por la tele o en la película aparece por allí cerca!! ¿dónde estaría??
Eran las 22h, no sabíamos si ir a ver alguna cosa más o volver al hotel. Como habíamos comido tarde no teníamos hambre. Fuimos a la parada de metro Palais Royal, al principio dudamos si “eso” era una parada de metro, pues no había señal ninguna de “metropolitan”, y la entrada tenia forma de obra de arte abstracta, como una corona de colorines.
Llegamos al hotel, saludamos al recepcionista majo y subimos a la habitación.
En la room propusieron de salir a cenar, pero yo sintiéndolo mucho estaba agotada y me apalanqué. Bajaron a comprar algo y yo las seguí porque no me quería quedar sola en la habitación. (vaale, quería volver a ver al chico, jeje). Estel preguntó donde había una tienda abierta. Y el chico respondió que al lado, girando la esquina de la calle.
Salimos corriendo sin abrigo seguramente a 0ºC o negativo. En el “Paki” compraron sándwiches, agua..Una vez de vuelta al hotel Estel pidió conexión a Internet. Miramos unas cosas, Estel nos enseño una web de Barbies de colección super chulas. Vimos que los 15min de conexión pasaron a 30min y asi 1h o mas..
Pensamos que el chico se había equivocado o que seguramente lo había hecho a posta.
Subí a la habitación mientras ellas se quedaron mas rato conectadas.
Ese fue el último día que vimos al simpático recepcionista.
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